La confidencialidad es la garantía de que la información de la organización será protegida para que no sea divulgada sin su consentimiento. Dentro de la organización, cada uno de nosotros debe manejar la información en forma correcta para garantizar que el acceso a la misma sólo sea posible por las personas que están autorizadas.
Un acuerdo de confidencialidad es el mecanismo mediante el cual se regulan los aspectos relativos a la confidencialidad de la información sensible que manejamos en nuestra actividad diaria dentro de nuestra organización. Siempre existe el riesgo de que se produzca una fuga de información, por esta razón es fundamental conocer y cumplir estos acuerdos que tienen el objetivo de garantizar la protección de la información confidencial.
En la actualidad, las compras con tarjetas de crédito o débito son cada vez más frecuentes. Como individuos tenemos derecho a que otras personas y organizaciones hagan un uso adecuado de los datos de nuestras tarjetas. Al mismo tiempo, si en nuestra actividad laboral manipulamos información de tarjetas de terceros, es nuestra responsabilidad hacerlo de manera segura.
Existe un estándar de Seguridad de Datos para la Industria de Pagos con Tarjeta (PCI DSS por sus siglas en inglés), el cual debe ser cumplido rigurosamente por las organizaciones que procesan, almacenan y/o transmiten datos de titulares de tarjetas. El estándar establece un conjunto de normas mínimas de seguridad, para proteger la información en las ventas o compras con tarjeta.
En la antigüedad se buscaba proteger los bienes más tangibles. Hoy en día se busca además resguardar uno de los activos más preciados que tenemos, nuestra información, intangible pero igualmente importante. La seguridad física se define como la aplicación de barreras físicas y procedimientos de control como medidas de prevención y resguardo de los recursos y de la información confidencial ante todo tipo de amenazas.
Debemos ser conscientes del derecho que tenemos como individuos de que otras personas y organizaciones hagan un uso adecuado de nuestros datos personales. El derecho a la protección de datos personales faculta a los interesados para disponer y controlar sus datos de carácter personal, pudiendo decidir cuáles proporcionar a terceros, así como conocer quién posee esos datos y para qué, y oponerse a esa posesión o tratamiento. Pero también debemos garantizar la protección de los datos personales de terceros y que utilizamos a diario en nuestro trabajo: datos de clientes, proveedores, trabajadores, etc.
¿Por qué hacer el curso?
Para empezar, es un curso divertido y se hace fácil; conocerás los principales riesgos y buenas prácticas relacionados con la confidencialidad de los datos de la organización, así como la protección de datos personales.
Una de las mayores preocupaciones hoy en día si trabajas en entornos digitales e informáticos es estar prevenido ante los constantes peligros a los que te enfrentas cuando no protegemos la confidencialidad de los datos de nuestra organización los datos personales.
¿Para qué sirve esta formación?
Con este curso conocerás los riesgos y peligros que podemos encontrarnos si no se cumplen una serie de normas en el uso de datos confidenciales de nuestra organización y de nuestros propios datos personales. En este curso no sólo conocerás todos estos riesgos, sino que aprenderás a evitarlos utilizando una serie de normas y buenas prácticas.
En definitiva, el objetivo de este curso es facilitar la adopción de nuevos hábitos de seguridad, concienciar de la responsabilidad de cada persona al utilizar datos confidenciales de la organización y conocer nuestros derechos en relación con los datos personales.
El conocimiento que aporta es un valor añadido que, sin duda, se convierte en una ventaja competitiva definitiva.
¿A quién va dirigido?
Este curso está dirigido a todas aquellas personas que usan equipos informáticos y dispositivos móviles de empresa o particulares y quieran aprender a proteger de la mejor forma posible su entorno digital e información privada.
De esta forma, cualquier persona habituada al uso de medios informáticos y digitales en su entorno laboral o personal puede sacar provecho de esta formación.